Las tasas de interés te hablan de inflación y riesgo
Tasa de interés, en inversión, se refiere a cuánto dinero vas a tener en el momento de que venza el plazo establecido y tu dinero te sea devuelto.
Dicen que todo en la vida tiene un precio -cuestión de opinión-, pero si hablamos de dinero, no hay duda de que lo tiene y ese precio se llama tasa de interés. ¿Por qué un precio? Porque si tienes el dinero, te van a pagar porque lo prestes, y si no lo tienes y lo pides, te van a cobrar por prestártelo durante el tiempo que lo requieras. En otras palabras, estás sacrificando gastarlo hoy para prestarlo y recibir un premio mañana, o bien, estás dispuesto a pagar un crédito para gastar hoy el dinero que no tienes. Es importante que sepas que cada vez que inviertes en instrumentos de deuda estás prestando dinero, ya sea a gobierno, bancos, empresas o hasta personas físicas.
Tasa de interés se define como: “el valor del dinero en el tiempo”, es decir, cuánto dinero vas a tener en el momento de que venza el plazo establecido y tu dinero te sea devuelto.
La tasa de interés se compone básicamente de dos elementos: la inflación esperada para el periodo y la tasa de riesgo.
La fórmula simplificada es la siguiente:
Interés nominal = Inflación + Tasa de Riesgo
La tasa de interés se expresa en términos anuales y en porcentaje.
Teniendo en cuenta una fórmula tan sencilla podemos empezar a sacar nuestras conclusiones respecto a las tasas de interés real de las inversiones (llamada tasa activa). Por ejemplo, si la tasa de un Cete es del 7% y la inflación es de 5%, sabemos a simple vista que el pago de riesgo al capital es de 2%.
Los rangos de tasas de interés que puedes encontrar en los mercados financieros pueden ser muy amplios. Es tentador que te ofrezcan un papel comercial con una tasa anual del 50% cuando la inflación es de 5%, tú decides si inviertes o no, pero tienes muy altas probabilidades de no ver tu dinero de regreso dado que el instrumento tiene un alto riesgo, de ahí el premio al capital. Es muy importante recordar que la tasa de riesgo juega en ambos sentidos, puedes ganar mucho, pero también puedes perder mucho.
Ahora bien, pensemos en las tasas de interés que te cobran cuando pides dinero prestado (tasa pasiva). Un primer factor determinante es si el crédito cuenta con alguna garantía, el ejemplo más claro es una hipoteca donde el inmueble se puede vender para solventar la deuda. En cambio, en una tarjeta de crédito los intereses son muy altos, ya que, si el cliente no paga, la institución requiere de grandes esfuerzos para recuperar el dinero prestado y sus probabilidades de cobrar son bastante bajas.
Otro factor para determinar las tasas son los plazos de los créditos. A mayor plazo la tasa es mayor, tanto por la incertidumbre del pago como por el tiempo en el que el prestamista recuperará su dinero.
La tasa de interés es también la variable con la que los Bancos Centrales regulan la oferta y la demanda de dinero. Si desean inversión, las tasas bajan para desincentivar el ahorro y que la gente busque a través de negocios un mejor rendimiento. Si, por el contrario, desean retirar dinero del circulante para controlar la inflación, pagan mejores tasas y los ahorradores prefieren las inversiones financieras.
Decidir qué riesgo asumes en tu cartera en un tema complejo. Tienes que conocerte para saber si eres una persona que acepta los riesgos sin que eso te cause temor, o bien, si eres totalmente adverso al riesgo y prefieres asumir una posición donde tu dinero no corra riesgos, pero hay que decirlo, tampoco crezca. En Más Fondos podemos ayudarte a analizar cuál es la posición de máximo riesgo que puedes asumir sintiéndote cómodo con tu cartera.
Una regla elemental también es la diversificación de productos. Tener distintos instrumentos en plazos variados y con tasas distintas ayuda a dar equilibrio y balance a tus finanzas. En estos casos hacerlo directamente puede resultar complicado, además de necesitarse capitales importantes para poder comprar diferentes productos.
A través de fondos de inversión puedes concretar en tu cartera una amplia diversificación sin ser un experto. Los fondos de deuda especializados en objetivos específicos te abren la puerta a obtener los mejores rendimientos dada tu tasa de riesgo. En Más Fondos te estamos esperando, acércate a nuestros asesores.
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