20 de julio de 2016
Después de un cuerpo a cuerpo cerrado que ha durado toda la noche, Gran Bretaña ha elegido salir de la Unión Europea. El 51.9% de los electores votaron a favor del Brexit, mientras el frente del “Remain” ha cerrado con el 48.1%. Con una alta afluencia que superó el 72%.
El voto evidencia a un país partido a la mitad, también a nivel generacional. Ahora, el Reino Unido cuenta con dos años para renegociar los acuerdos comerciales que tiene con Bruselas.David Cameron dimite
La primera consecuencia política de la victoria del frente Brexit ha sido la dimisión del Primer Ministro David Cameron, valiente defensor del Remain, que ha anunciado que en octubre la Gran Bretaña tendrá un nuevo ministro. Ello ha regocijado a los promotores del Leave, en particular a Nigel Farage. Ya se ha previsto un encuentro entre Merkel, Hollande y Matteo Renzi.
CORTO PLAZO
Domina la emotividad con una pérdida financiera, escasa liquidez y oscilaciones ostensibles. Esta fase durará pocos días, tal vez una semana, dependiendo de la rapidez de la respuesta política monetaria.
En los próximos días se esperan intervenciones tanto de naturaleza monetaria como de naturaleza política. El evento ya se había anunciado desde hace meses, ya que la BCE así como el Banco Central de G7 expresaron en múltiples ocasiones estar listos para afrontar una eventual crisis de liquidez. Es casi seguro que la banca de Inglaterra procederá con el recorte de tasas.
MEDIANO PLAZO
Pueden surgir elementos positivos, como un replanteamiento inglés o una fuerte respuesta europea. Actualmente la recuperación económica es relativamente discreta mientras en el 2008 ya era una recesión.
Se prevé una reunión del Eurogrupo para el martes 28 de junio; pero probablemente los líderes europeos se encontrarán, al menos de forma informal, desde el fin de semana. La Unión Europea puede reafirmar la voluntad de reforzar la unidad de los países miembros que permanecen, buscando controlar a las posibles oposiciones que probablemente se manifestarán en todos los países.
LARGO PLAZO
Si en el largo plazo la situación no cambia, la incertidumbre acerca de las nuevas regulaciones puede desacelerar la inversión en euros de las empresas extranjeras y locales, creando problemas ulteriores al ya de por sí magro crecimiento económico europeo.
En esta fase, la salida del Reino Unido es un movimiento que cambia el epicentro de la Unión Europea hacia Europa continental. Francia y Alemania, en particular, se verán en la necesidad de reforzar su cooperación. La primera prueba serán las elecciones españolas, pues veremos si el sentimiento antieuropeo hace mella en los comicios y genera más adeptos.
El Global Investment Team de nuestro Grupo Azimut hizo un análisis a profundidad del mercado chino
*Entrevista para Fund Pro, de nuestra Directora General Adjunta, Maria Grazia Sonzogni - 19 agosto 2021