30 de agosto de 2018

Uno de los problemas que tuvieron los contribuyentes este año al presentar sus declaraciones anuales, fue que parte de las deducciones personales a las que creían tener derecho, no cumplieron con los requisitos establecidos por la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y no pudieron ser aplicadas.

Desafortunadamente los errores en las facturas electrónicas (CFDI), la emisión oportuna o el método de pago no son fácilmente corregibles dentro del mismo mes en el que se efectúa el gasto, ahora imagina lo que sucede si un año después solicitas una corrección. El poderla llevar a cabo es simplemente imposible.

Es importante que, durante el año, pongas especial atención en obtener todos tus comprobantes fiscales digitales con todos los requisitos necesarios. Pon especial atención a éstos para evitar los errores más frecuentes:

• Solicita en la escuela de tus hijos las facturas por las colegiaturas. Pon atención a que el pago no sea en efectivo y que se incluya correctamente la CURP y el nombre de tu hijo. Recábalas mensualmente y recuerda que esta deducción está topada.

• Cuando vayas al doctor, dentista, nutriólogo, psicólogo o al hospital, pide tu factura. Generalmente te la envían unos días después por correo electrónico. Sé insistente si no te llega, muchas veces son asistentes quienes las emiten y lo olvidan fácilmente. Paga con tarjeta de crédito, débito, cheque o transferencia electrónica de fondos. Por ningún motivo pagues en efectivo porque la deducción no es válida. Si la consulta es para tus dependientes económicos revisa que esté incluido correctamente el nombre.

• También son deducibles honorarios por servicios profesionales de enfermería.

• Un par de lentes ópticos graduados para corregir defectos visuales, hasta por un monto de $2,500 pesos en el ejercicio. En el CFDI se debe describir el defecto visual o bien, se debe contar con el diagnóstico del oftalmólogo u optometrista.

• Recaba a final del año las constancias de intereses pagados y ganados con tu institución financiera.

• Si el transporte escolar es obligatorio, solicita la factura correspondiente. Si el transporte es optativo, no es deducible.

• Las medicinas adquiridas en la farmacia no son deducibles. Pero sí las incluidas en la factura del hospital.

• Cuando te envíen el correo electrónico con los comprobantes, descárgalos y guárdalos en una carpeta en internet para que no se extravíen.

• En el portal del SAT en facturación puedes revisar mes a mes las facturas que se han emitido a tu nombre. Te recomendamos revisarlas, sobre todo, si los montos son importantes o tienes dudas de que se hayan emitido correctamente.

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